La Constitución española de 1978

Un día como de hace 41 años España se adentraba en un régimen verdaderamente democrático, teniendo el precedente de la II República. Desde ese 29 de diciembre de 1978 a este 29 de diciembre de 2019, muchas cosas han cambiado en nuestro país. Seguimos teniendo un sistema fuerte que nos ha permitido lograr un gran desarrollo como país siendo una de las principales economías de la UE y del planeta. No obstante, no llueve a gusto de todos y nuestros dos principales problemas los encontramos en el paro y en Cataluña. La gran virtud de nuestra constitución es el haber sido apoyada por casi la totalidad de partidos políticos y de la sociedad española. Quizás, los poderes públicos debieran de fomentar reuniones y debates con los agentes sociales y activistas para lograr consensos que, dentro de lo amplia que es la Carta Magna, propicien verdaderos cambios para solucionar problemas más graves que los privilegios caducos h medievales de un sector pequeño del arco político catalán. Este sentido tenemos que modificar el pago de las pensiones, lograr subir los salarios por acuerdo de todas las partes implicadas, una transición energética ordenada y consensuada de carácter paulatino hacia las cero emisiones y com error a España en un motor energético mundial aprovechando sus grandes condiciones para las renovables. Quizás esto sea más beneficio para el país y poder mantener los altos estándares de los que gozamos gracias a la Constitución