Con las manos en la masa: Huevos rellenos

Hola a todos. Casi tres meses después vuelvo a retomar la actividad en mi blog. A ver cuando de una vez vuelve a ser de nuevo regular y no tan irregular como en los tres últimos años. Retomo nuevamente mi sección culinaria, ya que hoy he ayudado en casa a preparar la comida. De segundo plato hemos degustado unos huevos duros que, salvo cocer los huevos y sacar el parte del relleno de la lata, que ha sido tarea de mi madre, me he encargado de cocinar. ¿Qué ingredientes hemos utilizado? Dos docenas y media de huevos, éramos 6 para comer, atún, aceite de girasol y sal. En primer lugar, una vez pelados los huevos, se procede a cortados en mitades a lo largo, sacando a continuación cada media yema, que se depositan en un plato a parte. Cumplido este primer paso, procedemos a elaborar el relleno de los huevos, que se puede ser a gusto de los comensales admitiendo gran variedad de ingredientes. En mi casa siempre se han hecho con atún y tomate. Procedemos a utilizar 7 latas de conserva de atún con tomate. Se vierte el contenido en una fuente grande y se mezcla con la gran mayoría de las yemas cocidas que se han separado de los huevos. Hecha la mezcla, se procede a rellenar cada mitad de huevo con la pasta obtenido. No suelo ser rácano en este aspecto, sino bastante generoso, así colmaremos bien el hueco e incluso que desborde. Cuando se haya rellenado el huevo lo ponemos en la fuente plana en la que los vayamos a servir. Así sistemáticamente con cada medio huevo. Terminada esta tarea, el siguiente paso será preparar la mayonesa que cubrirá los huevos a modo de salsa. Se echan dos huevos, sal y se cubre todo con abundante aceite de girasol para que la mayonesa quede más suave. Si le queremos dar algún sabor, se echa también lo que le queramos añadir. Con la batidora se mezclan todos los ingredientes, procurando que la mayonesa no quede muy espesa. A continuación se vierte sobre los huevos la mayonesa natural. Finalmente, resta decorar el plato, para lo que emplearemos las yemas que no habíamos utilizado aún. Con un rallador, y sobre el plato, vamos rallando la yema, de forma que caiga sobre la mayonesa dándole un magnífico color amarillo. Voilà, este es un magnífico plato para un día como hoy, y también para cualquier celebración o comida normal. Espero que os guste.