Hola a todos. Hoy ha tenido lugar la octava etapa del Tour de Francia, que ha sido la primera de montaña, media montaña mejor dicho, y que supone el primer contacto con el ciclo alpino, que será este año el primer bloque de montaña. Mañana será la subida de Morcine. Hoy se trataba de una etapa en principio no muy dura, pero que al final ha sido más dura debido al ritmo impuesto por los del Bouygues Telekom de Voeckler. La etapa no ha tenido mucha historia, pues entre los favoritos no ha pasado nada. Lo más interesante ha sido la buena y genial actuación de un joven corredor español del equipo de Machín, antiguo director del Saunier Duval y la sensacional actuación de Sylvain Chavanel. Su actuación en este Tour tiene mucho merito, pues en marzo en un caída se fracturó la base de cráneo. Vamos para no contarlo. Ya de milagroso tiene que haya podido recuperarse tan pronto de semejante lesión, pues si encima gana etapas ni te digo. Ganó creo que el domingo, aunque el pelotón paró. No obstante, hoy el pelotón ha lucado y Sylvain también. Ha atacado y tras coger a su compañero y actual líder de la montaña y pasarlo, pues estaba fundido ya, ha hecho una gran ascensión al último puerto de segunda categoría, lo que ha concluido, en un derroche de inteligencia, madurez y energía, en su segunda victoria este año en el Tour y también en la segunda vez que se pone de líder y se lo arrebata a Fabien Cancellara. Me alegro mucho por Chavanel, pues es un corredor que me gusta mucho, ya que es tiene mucho pundonor, entrega, coraje y encima calidad. Me alegro por él.
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