Mudejarismo en Teruel

Hola a todos. La semana pasada estuve en Teruel de Congreso y por eso he tenido el blog un poco descuidado, pues vine el sábado y el resto del fin de semana lo dediqué a ver la vuelta, que ya ha acabado, al Zaragoza y algún otro espectáculo deportivo. Este año no presente nada en el Congreso, pero es que si lo hacía no acababa la Tesis Doctoral. Me lo pasé bastante bien, aunque hubo algún día con una situación incomoda, cuyo protagonista principal, por respeto a muchas personas presentes y que no lo están, no desvelaré. Nos juntamos buen grupo, los amigos del trabajo, y fuimos a cenar y a comer al Roquelín y a un sitio llamado El rincón del oso que hacen unas croquetas muy buenas. También estuvimos un rato en los columpios recordando el crío que llevamos dentro y, como no, tomando nuestras respectivas cervezas en el Franagans, que es todo un clásico, al menos para mi, que no puedo irme de Teruel sin haber estado en el Franagans. No obstante, descubrí una cafetería que debe estar bien, el Niza, que me recordó a la nueva cara de la cafetería del mismo nombre en Pamplona, cuya versión nueva conocí gracias a una ilustre labitolosana, Nieves. Volviendo a Teruel, tengo que decir que acerté que la simpatíquisima y eficientísima camarera que nos atendió en el Rincón del Oso era rumana, pese a que por aspecto podía ser ecuatoriana o colombiana. Me alegré de acertar, pues el hecho de tener una prima rumana ha hecho que me habitúe a su manera de hablar.